viernes, 4 de diciembre de 2009

Nacer hombre, nacer mujer

Ayer me asaltaron unas dudas. Bueno, realmente toda mi vida me asalta la misma pregunta. ¿Por qué nací mujer? ¿Por qué no hombre?
Siendo hombre, mi vida sería más sencilla porque no me complicaría tanto con las preguntas (las que formulo y dejo en el tintero por miedo o vergüenza), con las respuestas (con las hipotéticas que me imagino y con las que me dan), ni le buscaría tres pies al gato intentando descifrar qué significa tal palabra o tal gesto.
Simplemente me apetecería x e intentaría llegar a x.
Tendría más reconocimiento profesional y más sueldo, no me haría falta demostrar continuamente que valgo.
Podría meterla (y disculpénme por usar estos términos) en cualquier hueco sin miedo a quedarme enamorado porque esa persona fue un amor conmigo. No quiero decir que los hombres no se enamoren porque puedo dar que por lo menos para un hombre en mi vida fui la persona más importante en la suya por un largo tiempo. Ni menosprecio su inteligencia ni su saber estar.
Pero cada día me decepciono más y el miedo me acompaña y la inseguridad también.
Por su propia forma de ver el mundo las disputas entre hombres no existen y si las hay, se solucionan rápidamente sin maquinaciones ni dimes ni diretes, ni puñeterías...Mira que somos malas las mujeres entre nosotras jeje
Hoy por hoy, quisiera ser un hombre al que le cayó del cielo un angelito. Sin necesidad de compromisos ni miedos porque un día ese angelito coja sus alas y las deposite en otro lado o porque yo quiera compartir mi tiempo con otros angelitos. Sin reproches, sin miedos... solamente disfrutando de lo bonita que es la vida y de todo lo que nos ofrece.
Quisiera poder mirar y admirar la belleza haciendo uso de la excusa que como animal que soy, no puedo evitar mirar y admirar y sentir un cosquilleo y unas ganas de pasar el rato con una mujer que pasa por mi lado y de la cual me enamoro a primera vista.
Ser tan sencillo y no tan complicado.
Nací mujer, y miro y admiro la belleza que pasa por mi lado. Y sí puede que sienta ganas de compartir mi tiempo con algún angelito que pasa y del cual me enamoro. Pero me complico la vida buscándole tres pies a un gato que anda cojo.
¿Existe alguna pócima para desenamorarse?